Los cuatro centros educativos de las tres localidades afectadas por la reciente riada han iniciado este jueves el curso escolar, tras un retraso de entre dos y tres días en el calendario previsto.
En Massanassa, tanto el CEP Lluís Vives como la Escuela Infantil Ausiàs March han comenzado las clases con normalidad.
En Algemesí, el CEIP Carme Miquel ha optado por un inicio progresivo. Este jueves han retomado la actividad los cursos de 3º a 6º de Primaria, mientras que este viernes lo harán los de 1º y 2º. El alumnado de Infantil comenzará el lunes.
Por su parte, el CEIP Orba de Alfafar ha abierto sus puertas este jueves. Aunque la dirección y el profesorado se han reincorporado, el centro ha recibido a un número reducido de alumnos, ya que el ayuntamiento mantenía organizadas actividades lúdicas.
El director general de Infraestructuras Educativas, José María Larena, visitó los cuatro centros y agradeció “el trabajo inmenso de los técnicos, del Ayuntamiento y de la Conselleria, de las empresas y equipos directivos y docentes” que ha hecho posible la vuelta a las aulas. Más tarde se desplazó a la parcela del CEIP Carme Miquel para comprobar el avance en el derribo de las instalaciones afectadas.
El conseller de Educación, Cultura, Universidades y Empleo, José Antonio Rovira, destacó que con la reapertura de estos centros “todo el alumnado afectado por la riada ha retomado las clases en sus propios municipios”.
Todos los centros cuentan ya con certificados de seguridad que garantizan la normalidad en el inicio de la actividad lectiva. Los pequeños trabajos pendientes se completarán fuera del horario escolar para no interferir en la enseñanza.