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El PP detalla que el alcalde se puso la vacuna la misma mañana que un hombre de 81 años, «pese a sus 29 años y gozar de buena salud». Asimismo, Ciudadanos tacha de «muy grave» que se haya servido de su condición política para recibir la vacunación.
Tras conocerse que el alcalde de Rafelbunyol, Fran López ya se ha vacunado de la COVID-19 (durante el primer día que comenzó la campaña), no han tardado en surgir reacciones políticas. Concretamente, de los partidos municipales PP y C´s, los cuales han exigido la dimisión «inmediata» de Fran López como alcalde.
Por un lado, el presidente del PP de Rafelbunyol, Alfonso Benito, ha hecho publica esta petición por tratarse del “ primer alcalde vacunado de España”, el mismo día que comenzó la vacunación.
«Si Batiste Martí, un hombre de 81 años residente en la residencia Virgen del Milagro de Rafelbunyol, fue el primer valenciano que recibió la vacuna el domingo 27 de diciembre, López fue el primer alcalde en hacerlo también esa misma mañana pese a sus 29 años y gozar de buena salud», ha concluido el presidente popular en un comunicado.
Por otro lado, la portavoz de Ciudadanos Rafelbunyol, Asunción García Botet, ha hecho esta demanda porque el alcalde «se ha aprovechado de la vacunación en la residencia de mayores municipal”. Además reitera que “aunque ya ha pedido disculpas y ha avanzado que no dimitirá, insistimos en que sí debe hacerlo».
Asimismo, Botet ha detallado que es «muy grave» que se haya servido de su condición política para «recibir una medicación que no le correspondía todavía” y ha tachado esta acción de «egoísta e inmoral», el hecho que una persona «tan joven» se vacune cuando hay personas que «lo necesitan y están esperando la vacuna».
Botet ha manifestado también que se trata de «una excusa» el decir que lo hizo «para dar ejemplo, ya que si hubiera sido así, lo hubiera publicitado». Sin embargo, prosigue «nos hemos enterado por la prensa de su lamentable actuación”.
“Lejos de dar ejemplo, ha conseguido todo lo contrario”, ha criticado García Botet, al tiempo que ha defendido que “con su irresponsable acto pone en entredicho a las instituciones y aleja a la ciudadanía de la política”.