La Guardia Civil ha desmantelado en Macastre una plantación de marihuana oculta en un inmueble, donde han sido incautados 240 kilogramos de cannabis, 25 gramos de cocaína y más de 1.000 euros en efectivo. Un hombre de 61 años ha sido detenido como presunto responsable de la explotación ilegal.
La investigación, llevada a cabo por el Puesto Principal de Buñol, comenzó tras recibir información sobre una posible plantación indoor en la zona. La empresa eléctrica colaboró con las autoridades al detectar un enganche ilegal en la vivienda investigada, lo que confirmó el fraude en el suministro de energía.
Para recabar más pruebas, los agentes utilizaron un dron que captó imágenes térmicas reveladoras: temperaturas inusualmente altas en una edificación anexa, aire acondicionado en estructuras tapiadas y ventanas selladas, junto con material aislante aluminizado visible desde el exterior, signos habituales de este tipo de cultivos ilícitos.
Con una orden judicial, el pasado 19 de febrero se registró el inmueble, hallando un sofisticado sistema de cultivo con iluminación artificial, riego por goteo, filtros de aire y equipos de refrigeración. La plantación operaba en ciclos de tres meses para una producción continua. Además, los investigadores encontraron anotaciones detalladas sobre el crecimiento y floración de las plantas.
Durante el registro, además de las 1.095 plantas de cannabis, se intervinieron 174 gramos de cogollos listos para su distribución, dos piedras de cocaína y 1.020 euros en efectivo. También se decomisó el vehículo del detenido.
El operativo fue realizado por agentes del Área de Investigación de Buñol, con el apoyo de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USECIC) de Valencia y el Equipo de Policía Judicial de Requena. Tras la detención, las diligencias han sido remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Requena.