La Guardia Civil ha abierto una investigación a un hombre de 43 años por su posible implicación en un incendio forestal en Ibi, el cual se declaró el pasado 18 de julio y arrasó alrededor de 185 hectáreas de terreno, incluyendo áreas de alto valor ecológico como el Parque Natural de la Font Roja. Este suceso ocurrió en un día marcado por un nivel de riesgo extremo de incendios forestales en la Comunidad Valenciana.
El incendio comenzó en el paraje de San Pascual, una zona con densa vegetación cercana a espacios naturales protegidos. Ante la rápida propagación del fuego, se movilizaron medios aéreos y terrestres para la extinción, siendo necesario también evacuar preventivamente varias viviendas en la zona.
Desde el comienzo, los especialistas del SEPRONA de la Guardia Civil trabajaron junto a los agentes medioambientales de la Generalitat Valenciana para investigar las causas del incendio. En las primeras inspecciones, se identificó el origen en una finca privada, donde se encontraron residuos vegetales y cenizas vertidas de manera incontrolada, sin las adecuadas medidas de prevención.
Una inspección adicional realizada el 19 de julio confirmó que el incendio fue causado por cenizas aún calientes que, al entrar en contacto con material seco, iniciaron las llamas. Como resultado, se investiga al hombre por un posible delito de incendio forestal imprudente, ya que se considera que su actuación fue negligente.
La Guardia Civil advierte que la legislación contempla sanciones, incluyendo penas de prisión, para aquellos que provoquen incendios forestales por imprudencia. Además, recuerdan a la ciudadanía la importancia de no verter cenizas sin asegurarse de que están completamente apagadas y de respetar las normativas sobre el uso del fuego durante períodos de alto riesgo.