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La mayoría de municipios de l’Horta han optado por esta alternativa para ayudar y compensar las restricciones sobre aforo y horarios que tienen que asumir los hosteleros estos meses.
En el Pleno ordinario de marzo el Ayuntamiento de Bonrepòs i Mirambell aprobó, por unanimidad de los tres grupos políticos que conforman el consistorio, la suspensión de la tasa de ocupación de la vía pública en terrazas por mesas, sillas y elementos análogos. La finalidad es ayudar a los hosteleros locales a salir adelante ante la crisis provocada por la COVID-19 y compensar las restricciones sobre aforo y horarios que tienen que asumir estos meses.
En este sentido, la alcaldesa Raquel Ramiro ha explicado que “escuchamos los problemas que tienen que afrontar nuestros autónomos y empresarios locales y hemos actuado rápidamente poniendo en marcha todos los mecanismos que están a nuestra disposición para ayudar a un sector tan importante en nuestro municipio como es la hostelería”.
La edil ha recordado las medidas impulsadas durante este tiempo, como “la aprobación de un paquete de ayudas urgentes a este sector con motivo del cierre de los locales durante la primera declaración del estado de alarma, la concesión de subvenciones municipales para sufragar gastos corrientes como el alquiler, el agua o la luz derivados del funcionamiento de su actividad y, ahora, la suspensión de la tasa de terrazas».
Así, este martes se ha publicado en el Boletín Oficial de la Provincia el edicto del Ayuntamiento de Bonrepòs i Mirambell sobre la suspensión de la tasa de ocupación de vía pública, abriéndose el plazo de 30 días a los interesados para examinar el expediente y presentar las reclamaciones que estimen oportunas. En caso de no presentarse reclamaciones, la suspensión de la citada tasa quedará definitivamente aprobada.
Ramiro ha informado también que «en estos momentos se están tramitando las ayudas Paréntesis contempladas en el Plan Resistir, cuyo plazo termina el próximo miércoles 21 de abril, lo que supondrá una inyección de liquidez de cerca de 70.000 euros en el municipio».
