La consultora ambiental Heura ha sido seleccionada por la compañía alemana EFT Systems para diseñar el modelo europeo de gestión de baterías de litio de almacenamiento energético usadas, fabricadas en China e importadas a la Unión Europea.
El sistema se aplicará a partir de 2026 y establecerá cómo los productores deberán organizar la recogida, el tratamiento y el reciclaje de las baterías que ponen en el mercado, en cumplimiento del Reglamento Europeo (UE) 2023/1542 sobre pilas, baterías y residuos.
Un modelo para los 27 países de la UE
Desde su sede en Alfafar (Valencia), Heura ha comenzado a implantar los primeros sistemas nacionales de gestión en Bélgica y Portugal, que servirán como referencia para su posterior aplicación en los 27 países de la Unión Europea.
En Bélgica, el modelo va a integrarse en un marco regional “con fuertes exigencias de trazabilidad y garantías financieras”, indica José Guaita, director general de Heura. En Portugal, el sistema requiere licencias estatales y la designación de un representante autorizado, “con obligación de adherirse a un esquema colectivo salvo autorización para operar individualmente”.
Para Guaita, director general de Heura, este proyecto “nos ubica en el centro de un proceso europeo que definirá cómo se gestionan las baterías que acompañan la transición energética”.
La normativa europea permite dos formas de organización: los SIRAP (Sistemas Individuales de Responsabilidad Ampliada del Productor), en los que cada fabricante asume directamente la gestión de sus baterías, y los SCRAP (Sistemas Colectivos), en los que varios productores comparten un sistema común.
Heura es la encargada de adaptar ambos modelos a las normativas nacionales y a la estrategia de cada productor, “y garantizar que todos cumplan los requisitos de recogida, tratamiento, reciclaje y control financiero establecidos por la Unión Europea”, explica.
Qué se hará con las baterías usadas
El sistema clasificará las baterías en función de su estado. Las reparables o reutilizables se reacondicionarán y volverán al mercado con garantía de seguridad. Las declaradas residuo se enviarán a plantas de tratamiento para recuperar metales estratégicos como litio, cobre y aluminio, que se reintroducirán en la industria europea de baterías.
Con este proceso, según apunta Guaita, “se cerrará el ciclo de la economía circular y se reducirá la dependencia europea de materias primas importadas”.
Las baterías recogidas bajo el nuevo modelo se tratarán en una planta de reciclaje ubicada en Valladolid, promovida por EFT Systems, Ilunion y Botree, cuya entrada en funcionamiento está prevista para mediados de 2026.
Hasta su apertura, los residuos se canalizarán a gestores autorizados en los países donde opera EFT-Systems. Heura estima que el sistema permitirá gestionar más de 6.000 toneladas de baterías de litio al año en su fase inicial, cifra que “se multiplicará por diez conforme el modelo se extienda a toda la Unión Europea”, indica Guaita.
Un proyecto europeo diseñado en Valencia
Además de su impacto ambiental, el proyecto representa una decisión estratégica para la industria europea, al establecer un marco común de gestión que permitirá controlar todo el ciclo de vida de las baterías de almacenamiento energético, desde su puesta en el mercado hasta su reciclaje final.
Heura y EFT Systems estudian también la aplicación de este modelo a otros sectores con un uso intensivo de baterías, como energías renovables, telecomunicaciones y movilidad eléctrica ligera.