Cuando se habla de un seguro de vida, la mayoría entendemos que se trata de un producto asegurador que garantiza el cobro de una cantidad dineraria a los beneficiarios, en caso de que se produzca el óbito o la invalidez del tomador de la póliza.
Pero existen otras modalidades de seguros de vida que no establecen que la condición necesaria para el pago de la indemnización sea el fallecimiento del asegurado. Y en otros los beneficiarios perciben una renta mensual, en lugar de una indemnización única.
De este tema hemos charlado con un mediador de la compañía Allianz, especializado en seguros de vida.
¿Qué es exactamente un seguro de vida?
Un seguro de vida es un contrato que establece la siguiente relación entre una compañía aseguradora y una persona determinada, denominada «tomador».
Si se produce el fallecimiento o la invalidez de este, la aseguradora se compromete al pago de una indemnización o una renta mensual a los beneficiarios designados por el tomador. A cambio, este último paga una prima anual a la aseguradora.
Este producto asegurador no tiene nada que ver con el seguro de decesos; los seguros de decesos únicamente cubren los gastos corrientes originados por el fallecimiento del asegurado.
Tipos de seguros de vida
Según el momento y la forma en que se cobra el capital asegurado, existen distintos tipos de seguros de vida:
Seguro de vida con indemnización única
Este tipo de pólizas ofrecen protección en caso de fallecimiento o invalidez del tomador. Los beneficiarios reciben todo el capital asegurado tras la ocurrencia del fallecimiento del tomador. Estos seguros pueden ser de carácter permanente (cubren al tomador hasta el momento de su muerte) o temporales (cubren al tomador durante un periodo de tiempo determinado, por ejemplo, mientras paga un préstamo hipotecario).
Seguro de vida con renta mensual
En este caso, los beneficiarios reciben el capital asegurado en forma de rentas mensuales. Según las condiciones del contrato de seguro, estas pueden ser vitalicias o temporales.
Seguro de vida combinado
Se trata de una póliza que combina las ventajas de los seguros de vida de indemnización única y de renta mensual.
¿Por qué contratar un seguro de vida?
Los seguros de vida permiten asegurar el bienestar económico de la familia del tomador en caso de que este fallezca o quede incapacitado para trabajar. En este sentido, el primer objetivo es evitar problemas derivados de compromisos financieros ya asumidos, como hipotecas, préstamos o la educación de los hijos.
Además, los seguros de vida nos ofrecen una seguridad añadida: la protección ante cualquier imprevisto económico que pueda afectar en el futuro a nuestra familia.
En definitiva, los seguros de vida son la herramienta que nos permite proteger económicamente a nuestras familias, en caso de que se produzca nuestro fallecimiento o suframos un accidente o enfermedad que nos incapacite laboralmente.
A la hora de contratarlos, es preciso tener en cuenta tanto la situación financiera familiar actual como las posibles necesidades futuras. La forma de no errar el tiro en su contratación es confiar en un mediador especializado, quien, tras analizar nuestra situación financiera, nos recomendará el seguro de vida que mejor se ajuste a nuestras necesidades.