La Generalitat Valenciana ha abonado ya más de 286 millones de euros en ayudas destinadas a las familias damnificadas por la riada, una cifra que multiplica por tres la cantidad transferida por el Gobierno central para los mismos conceptos. Así lo reflejan los datos oficiales, que destacan la diferencia entre la agilidad en la gestión del Consell y la lentitud del Ejecutivo estatal en la tramitación de estas ayudas.
Hasta la fecha, 23.373 hogares han recibido 140,2 millones de euros por parte de la administración autonómica para compensar la pérdida de bienes y enseres de primera necesidad provocada por los daños en sus viviendas. Esta cuantía representa ya un 61% del presupuesto total asignado para esta línea de ayuda, cifrado en 230 millones.
En comparación, el Gobierno central ha abonado únicamente 60 millones de euros, que apenas cubren 3.400 solicitudes, lo que supone un 7,8% del total registrado a fecha de 25 de marzo.
En lo que respecta a los vehículos afectados por la riada, la diferencia entre administraciones es todavía más llamativa. El Consell ha tramitado y abonado 77.238 ayudas —el 89% de las solicitudes registradas—, lo que representa un importe total de 146,6 millones de euros, es decir, el 59% del presupuesto máximo previsto para esta medida.
Mientras tanto, el plan estatal Reinicia Auto+ solo ha pagado 5.000 ayudas, a pesar de haber concedido algo más de 9.600, de un total de 25.778 solicitudes registradas. Esto equivale a un 19% de ayudas efectivamente abonadas por parte del Gobierno central, que suma un desembolso de apenas 25 millones de euros.
En términos comparativos, el número de ayudas para vehículos pagadas por la Generalitat es 15 veces superior al del Ejecutivo central, lo que ha permitido a muchas familias recuperar su movilidad en un contexto de urgente necesidad.
Desde el Consell insisten en que la rapidez con la que se han procesado y pagado las solicitudes ha sido clave para ofrecer una respuesta efectiva a las personas afectadas, marcando una clara diferencia en la gestión de la emergencia frente a la Administración central.