LA UNIÓ ha realizado ya un primer cálculo de las pérdidas directas que la crisis sanitaria del COVID-19 deja por el momento en el sector agropecuario de la Comunitat Valenciana y la cantidad -según el estudio elaborado- pasa de los 64,7 millones de euros (22,1 millones de euros en Alicante y Castellón y 20,4 en Valencia).
Los sectores más perjudicados son aquellos cuyos principales clientes están en actividades declaradas como no esenciales.